El joven indígena Adelio Mendoza, quien fue liberado este lunes por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), tras permanecer por cinco días secuestrado, se reunió con los familiares de su patrón, el ex vicepresidente Óscar Denis, quien continúa retenido.
El joven Adelio Mendoza, tras su liberación y chequeo médico, además de contención psicológica por parte de psicólogos forenses de la Fiscalía, se reunió con los familiares del ex vicepresidente de la República, Óscar Denis, quien permanece en manos del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
La reunión se realizó en una estancia utilizada por la Fuerza de Tarea Conjunta /FTC) como base militar, ubicada a unos 20 kilómetros de la estancia Tranquerita, perteneciente a Denis.
Adelio fue liberado en horas de la tarde noche de este lunes, luego de haber sido secuestrado junto a su patrón el miércoles pasado. El plagio fue atribuido a una célula indígena del EPP.
Cerca de las 23.00 culminó el encuentro y no hubo declaraciones, según informaron los medios.
En un video que circula en las redes sociales se ve al joven entre lágrimas preguntando si también liberaron a su patrón. El nativo se veía muy consternado por la situación.
Las autoridades esperaban que Adelio pudiera aportar información sobre el estado de salud o cualquier dato que ayude a la liberación del ex político liberal.
El nativo fue examinado y no presentaba lesiones ni heridas en el cuerpo, pero aparentemente sí tenía un cuadro de deshidratación. En tanto que un equipo de psicólogos del Ministerio Público se acercó hasta el lugar para la contención de la víctima, además de funcionarios de Derechos Étnicos.
Los familiares de Óscar Denis habían solicitado una prueba de vida, como también exigido que se les suministre sus medicamentos al hombre, ya que es una persona enferma.
No obstante, de igual manera accedieron a realizar donaciones de víveres a comunidades indígenas de la zona, por un valor de USD 2 millones, a la espera de alguna noticia.
El grupo criminal también exige la liberación de sus líderes Carmen Villalba y Alcides Oviedo, quienes están presos en la capital del país.
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