Magda Benítez, quien resultó gravemente herida e incluso perdió parte de su miembro derecho, en un accidente el 31 de diciembre del 2015, exige que se haga justicia. La fiscal de Alto Paraná Mónica Larrosa quien conducía el vehículo a más de 140km/h en el casco urbano, fue señalada como responsales, se desentiende y recurre a chicanas jurídicas para evitar que la justicia la castigue.
La mujer, quien regresaba de vender sus productos en zona de Potrero Cué, distrito de Coronel Oviedo, a bordo de su motocicleta fue embestida por un automóvil que circulaba a gran velocidad (140 km/h) con destino a la capital sobre la ruta II “Mcal. Estigarribia”, la mujer salió gravemente herida y fue internada por más de 15 días en el hospital de Traumas de la capital en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI), le fue amputada una de las piernas para salvarle la vida, afortunadamente no sufrió lesiones en la parte de la cabeza, pues llevaba el casco protector.
La conductora del rodado, Mónica Larrosa, Agente Fiscal de la Unidad 5 de Alto Paraná, fue quien manejaba, tras el percance, intentó realizar el cambio y poner en su lugar como conductor a su marido Alexis Manuel Álvarez González, pero la rápida intervención de vecinos lograron que el dato no sea registrado a su modo en el parte policial.
El calvario de la mujer, empezó al intentar pedir ayuda a la fiscal para sus tratamientos médicos y la compra de una prótesis que le permita caminar y volver a llevar una vida normal, cuando esta desde el primer momento se negó y a través de chicanas jurídicas logró zafar a la justicia, desentendiéndose del caso.
El abogado de Magda Benítez, Diego Guillén, señaló que en principio solicitaron que la causa sea caratulada como lesión grave, considerando que le fue amputado un miembro, pero el caso quedó como lesión culposa.
En la jornada de ayer se debió realizar la audiencia de apercibimiento ante el Juez Víctor Venancio Vera Valloy, pero la fiscal no se presentó. Por lo que solicitaron la causa sea elevada a Juicio Oral.
“Siempre presentaba excusas para no presentarse, ni en la audiencia conciliatoria participó, nunca ayudó en nada a la afectada, por lo que pedimos que se haga justicia, no es posible que por ser una funcionaria del Ministerio Público tenga esos privilegios”, indicó el profesional.
A un año la mujer sigue clamando justicia y pide un resarcimiento económico para solventar su recuperación, porque desde aquel momento no puede continuar con sus trabajos y es además el sustento de su familia. Sólo pide que los responsables se hagan cargo.