Pocas horas después de ser liberado, el gerente general de logística de una transportadora de caudales siente que volvió a nacer. Agradeció que nadie resultó herido en el asalto tipo comando, en que el sistema de seguridad impidió que los delincuentes accedieran a la bóveda.
Dos víctimas hablaron brevemente con Telefuturo y NPY luego de pasar momentos de terror como rehenes de un grupo de delincuentes encapuchados con armas largas que pretendían acceder al depósito de la empresa transportadora de caudales Britimp.
“Estamos bien, ya pasó la parte complicada y es volver a vivir, a nacer, así que estamos bien”, expresó Pedro Santiago Barrios, gerente general de logística de la empresa.
Comentó que al principio, cuando los hombres irrumpieron en su vivienda, ubicada en San Lorenzo, no hubo agresiones. Barrios y su esposa Emilia Sánchez fueron tomados como rehenes y llevados en vehículos diferentes.
Mientras que en la casa quedaron la suegra y el hijo, quienes dieron aviso a la Policía Nacional.
Aunque Barrios dijo que nadie resultó herido, reconoció que hubo golpes por parte de los asaltantes.
“Estamos bien, gracias a Dios, estamos bien, estamos todos sanos, nos soltaron otra vez después de varias horas, pero bien, no les lastimaron a mi hijo, a mi esposa, a mi suegra, nada”, remarcó.
Mujer recurrió a vecinos para ser auxiliada
Su esposa relató que luego de ser llevados a la empresa sobre Mariscal López, en la zona de la Municipalidad de Asunción, ella fue liberada en Fernando de la Mora con su vehículo, pero sin llaves y sin información de su marido, quien estaba en otro automóvil. La mujer recurrió a vecinos para ser auxiliada.
El oficial Herme González, de la Comisaría 65 ª de Calle’i, comentó que se identificaron una camioneta Fortuner de color blanco, una Hilux negra y un vehículo Chevrolet Onix blanco, con un ploteado que simulaba ser de la empresa.
En estos vehículos, incluyendo otro perteneciente a pareja, los asaltantes se dirigieron al centro de monitoreo de la transportadora de caudales, donde utilizaron el teléfono del gerente para comunicarse con el encargado del lugar, Francisco Ortiz, para que recibiera una supuesta encomienda, pero al abrir la puerta también fue tomado de rehén, ya que tendría el código de acceso a la bóveda.
Las tres víctimas fueron trasladadas posteriormente hasta la empresa, donde hay varios accesos que requieren de códigos. En el segundo portón, los empleados de seguridad se acercaron para realizar una revisión por la sospechosa situación, momento en que los delincuentes realizaron disparos y huyeron.
De acuerdo a González, los códigos de acceso no son permanentes, sino que se van generando desde el centro de monitoreo, pero debido a que el encargado estaba en poder de los asaltantes, estos ya no tuvieron contacto con el sistema, lo que impidió el ingreso a la bóveda y que los guardias de seguridad reaccionaran.
Al desistir de su operativo, el grupo liberó a ambos empleados detrás del Shopping San Lorenzo. Uno de ellos caminó hasta la Comisaría 65 ª de Calle’i para realizar la denuncia, mientras que Emilia Sánchez fue liberada cerca de las 4:35 en Fernando de la Mora.
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