Supuestamente, el perrito entró a su patio y quiso llevarse un pedazo de carne que el agente iba a poner en la parrilla.
Bernardo Franco Duarte, suboficial inspector de policía, fue imputado por la fiscal Norma Salinas por maltrato y crueldad animal. El uniformado fue sindicado por vecinos del barrio Florida de Caaguazú como autor de los disparos que acabaron con la vida del perrito de raza mestiza, Tuky, ocurrido el fin de semana último.
De acuerdo con la necropsia realizada al cuerpo del animal, este recibió en total diez heridas luego que los proyectiles se desintegraran al entrar a su cuerpo.
El policía disparó contra él con una escopeta con balines de goma, supuestamente luego de que el perrito entrara a su casa para intentar llevarse un pedazo de carne del asado que preparaba Franco Duarte para tirar a su parrilla. El animal pertenecía a doña Adela Coronel, una paraguaya que reside y labura en Argentina.
La humana de Tuky formuló la denuncia del hecho a través de la activista animalera la abogada Laura Yinde, representante de Patitas Caaguazú, quien formalizó la denuncia en sede de la comisaría 24 local.
La fiscala detalló que el miércoles se realizó un allanamiento en la vivienda del hoy imputado, donde si bien no se pudo hallar el arma del crimen, se constató que el mismo suele utilizar un arma de ese tipo. «Su esposa nos contó que utiliza en invierno para salir a cazar palomas, pero que ahora mismo no sabe dónde está esa arma», refirió la fiscala.
No obstante, las autoridades solicitaron a la Dirección de Material Bélico (Dimabel) datos referentes a las armas registradas a nombre del agente, pero confirmaron que no tiene a su nombre escopeta alguna.
Salinas solicitó para el policía medidas alternativas a la prisión, considerando que el delito tiene una expectativa de pena carcelaria muy baja (hasta 3 años), pero adelantó que en caso de llegar a un juicio oral podría ligar una multaza de aquellas conforme con la ley de protección animal.