La víctima recibió 17 puñaladas en distintas partes del cuerpo, mientras que el hombre intentó acabar con su vida.
Tras una larga jornada laboral, Deidamia Agüero Céspedes, de 29 años, llegó a su inquilinato, ubicado en el barrio Don Bosco de Pedro Juan Caballero, donde vivía con su hijo de 8 años. Minutos después, su expareja, Sebastián Esteche llegó para llevar a su hijo, pero inició una discusión entre los dos.
El hombre sacó un cuchillo y comenzó a clavarle a su expareja frente a su pequeño hijo, que desesperado salió a buscar ayuda gritando a los demás inquilinos: “le están clavando a mi mamá”.
Los vecinos llamaron a la policía y a los bomberos voluntarios, que llegaron al sitio y se encontraron con una terrible escena.
“Fue muy impactante para todos, ambos estaban en el suelo comenzamos a revisarlos y la mujer casi ya no tenía pulso, por lo que la llevaron rápidamente hasta el Hospital, pero lamentablemente falleció”, dijo el bombero Carlos Marín a Futura FM.
La mujer recibió 17 puñaladas, de los cuales 9 fueron muy profundas y afectaron órganos vitales. Mientras que el hombre intentó acabar con su vida, clavándose en el pecho y cortándose la muñeca y el cuello, pero no lo logró y se encuentra internado en el Hospital Regional de Pedro Juan.
Los familiares indicaron a la policía que la pareja estaba separada hace un año, justamente por la violencia que sufría la mujer, sin embargo, el comisario Mariano Ledesma dijo que no hay antecedentes de denuncia por violencia contra el hombre.
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