Luego que la menor haya comentado a su madre que era objeto de extorsión por parte de la docente Gladys Elizabeth Ayala Bernal, la misma reconoció el hecho y firmó un acta en la dirección de la institución además de varios pagarés por valor de G. 4.500.000 para reparar el hecho, ante su incumplimiento se realizó la denuncia penal.
El caso de extorsión a una alumna del sexto grado de la escuela Wenceslaa Escalada ocurrido a inicios del año lectivo 2016, se dio a conocer luego que la menor decidió contar a su madre en agosto del 2016 y esta recurre hasta la dirección general para denunciar el hecho en primera instancia.
En una reunión realizada entre la madre, la menor y la docente afectada con presencia de la directora Teresa Duré de Fernández , termina reconociendo el hecho y asume la responsabilidad en devolver el dinero en su totalidad, unos G. 4.500.000 firmando incluso varios pagarés al respecto.
A raíz del incumpliendo, la madre decidió realizar la denuncia ante el Ministerio Público, que la imputó por coacción, extorsión, y extorsión agravada, con una pena privativa de libertad de hasta 10 años, según expresó la fiscal Viviana Duarte en contacto con PRENSA5-RADIO, fue presentada ante el Ministerio Público una grabación de la extorsión de la docente y el acta de acuerdo y los pagarés.
A pesar de la denuncia en su contra y la imputación, la misma desempeña funciones en una institución educativa de Saltos del Guairá, la información fue confirmada por la propia coordinadora departamental, Alcira Benítez. «Ahora que fue imputada, vamos a remitir la carpeta con una nota al MEC para la apertura de un sumario administrativo en su contra», indicó.
ANTECEDENTES:
El hecho habría ocurrido el año pasado en la escuela ubicada en el centro de Coronel Oviedo, departamento de Caaguazú, cansada de las constantes amenazas y el pedido de dinero hecho por la docente, una alumna de 12 años decidió contar a la madre y ambas lograron grabar como la misma obligaba a la estudiante robar a sus padres.
Según el relato de la niña, todo empezó cuando la docente le preguntó a que se dedicaban sus padres, ésta le respondió que al comercio en el mercado municipal, en la ocasión le pidió que consulte a sus padres si podía retirar mercaderías a crédito y pagar a final de mes, ante la negativa los padres, la misma insistió con la menor y le solicitó en préstamo una suma de dinero. Ante una nueva negativa la docente empezó a extorsionarla.
“La profesora no me dejó ir a la clase de música y me encerró en la sala, ahí me dijo que quería que le de dinero a cambio de no bajarme la calificación y no hacer daño a mis padres, logré sacar de la caja del negocio un G. 50.000 que le entregué al día siguiente, se enojó y me dijo que la suma no le servía, me pidió que sea un monto superior”, expresó en declaración la menor.
En una segunda oportunidad entregó la suma de G. 300.000, cada semana, la misma habría obligado a la menor a entregar otro monto a cambio de no perjudicarle en sus calificaciones y no hacer dañosa sus padres, la obligaba a callarse y seguir robando a sus padres.
La misma señaló que iban anotando en un cuaderno la suma que le entregaba hasta alcanzar alrededor de G. 4.000.000 cuando la docente decidió borrar para no ser descubierta por sus padres, pero la menor continuó con el registro en otro cuaderno superando los G. 5.000.000., de acuerdo a datos que tuvo acceso el equipo de PRENSA5-DIGITAL.
CONTROLABA SUS PASOS. La menor señaló que la docente constantemente la amenazaba y controlaba sus pasos, hasta que en una ocasión fue invitada a participar de un retiro espiritual en los frailes, cuando la misma docente le indicó que también quería participar y pidió a la misma cubrir el gasto de unos G. 120.000, en todo momento la acompañó y no la dejaba sola.
“Siempre estaba conmigo, a donde iba ella estaba, era para que no le cuente a mis padres ni a nadie, ya no podía dormir tenía pesadillas toda la noche, expresó.
LE OBLIGÓ A PAGAR EL FESTEJO POR EL DÍA DE MAESTRO. La menor, cuyos datos omitimos al igual que sus padres, señaló que para el día del maestro le pidió que se haga cargo del festejo, por lo que se vió obligada a robar G. 700.000 del negocio familiar, pues le pedía una torta, un banner con su foto, bocaditos y un ramo de flores, la menor, indicó que pidió ayuda a sus compañeros para ir a comprar y realizar el festejo.
“Aunque cumplía con todo lo que me pedía ella me despreciaba y me humillaba frente a mis compañeros, siempre me maltrataba esperando que yo cumpla sus caprichos”, añadió.
PAGÓ REPARACIÓN DE AIRE. Al pedido constante de dinero, además fue obligada a pagar la reparación del aire de la sala de clase, unos G. 150.000, que posteriormente la docente volvió a solicitar la ayuda de los demás alumnos con G. 5.000 para el mismo efecto.
Durante la clase de Proyecto comunitario, indicó que la docente desarrolló como tema los derechos de los niños, situación que le ayudó a reflexionar y decidió contar a su madre, quien le pidió seguir y lograr una grabación como prueba contra la misma.
Tras reunir, decidieron denunciar el hecho ante el Ministerio Público, la fiscal Viviana Duarte quien investiga el caso lo imputó por coacción, extorsión, y extorsión agravada y solicitó medidas alternativas a la prisión, pero hasta la fecha no se puede realizar a audiencia debido a las chicanas jurídicas.