El descenso de casos se presenta en todo el territorio nacional, pero aún se debe salir de la zona naranja, que representa alta circulación comunitaria del virus. Disciplina ciudadana con el cumplimiento de medidas de prevención y protección puede cambiar situación actual y futura para bien.
La actualización semanal sobre la situación epidemiológica, difundida hoy por el Ministerio de Salud Pública, destaca que, prácticamente después de haber transcurrido un año, la capital del país deja de estar en zona roja o altísima transmisión comunitaria de COVID-19. La cantidad de casos tanto en Asunción, como San Lorenzo, Luque, Mariano Roque Alonso y área metropolitana está en área naranja, o sea, con alta circulación comunitaria, que también se encuentra en disminución.
Este patrón de descenso se observa en todas las regiones sanitarias del país. Los últimos dos meses han estado marcados por la disminución de casos, y hoy, muy pocos distritos están en zonas rojas, con altísima transmisión comunitaria.
Según manifestó el Dr. Guillermo Sequera, titular de la Dirección General de Vigilancia de la Salud, llama la atención en el sur, Ayolas, donde la cantidad de casos es aún importante para la cantidad de población de esta zona. Luego, están Capitán Bado, del departamento de Amambay, y San Carlos del Apa, de Concepción. No obstante, prácticamente la mitad del territorio nacional está en zona naranja y la otra mitad en amarillo.
Hospitalización y mortalidad
Solamente Alto Paraguay tiene una tasa de hospitalización muy alta para el departamento. En este sentido, el resto del país se sitúa en color naranja o nivel alto.
En cuanto a la cantidad de fallecidos por departamento, el tablero sigue en rojo. Hay que tener en cuenta que la mortalidad siempre tiene un rezago, por ello, un 20 a 30% de los fallecidos que se reportan en el día a día, corresponde a contagios de más de 15 días atrás.
El futuro inmediato
La predicción de la situación en los próximos meses no siempre es acertada, pero se comparte una plataforma realizada por la Dirección General de Vigilancia de la Salud y varios investigadores de la Universidad Autónoma de Asunción, en el siguiente link: http://epymodel.uaa.edu.py/
En esta plataforma, pueden elegir qué periodo de tiempo ver y hasta donde ver, en cuanto al impacto que tendrá el virus en la cantidad de casos, en las camas convencionales y en las camas de terapia intensiva. Asimismo, se puede ver lo que dice hoy para el fututo.
Esta herramienta, por lo menos hasta setiembre y principios de octubre, marca un descenso. Así también, diferentes escenarios, el más pesimista es la cantidad de camas UTI que estarán ocupadas.
Hoy, con aproximadamente 300 ocupaciones de camas UTI, se apunta a descender, según la plataforma disponible, y para los meses de setiembre y octubre, se tendría una ocupación de 150 camas, en el peor escenario que se presenta.
Estos modelos ayudan, pero no tienen la verdad, las predicciones son un reflejo de la conducta social. En la medida en que ésta se modifica, se espera que la tendencia cambie. Además, estas estimaciones pueden verse afectadas por la variante Delta.