Dirigentes de Sitrande se organizaron para colocar sillas para los usuarios que se acercan a la ANDE para realizar sus trámites y principalmente sus reclamos ante las escandalosas sobrefacturaciones en plena crisis sanitaria por el COVID-19, que incluso fueron calificadas por autoridades políticas como una “estafa”.
“En realidad hace tiempo venimos pidiendo a las autoridades de la ANDE la provisión de las comodidades a nuestros usuarios, es injusto que por una equivocación o error de nuestras autoridades hoy estén en esta condición, haciendo filas. El viernes la gente estuvo en la calle, con la lluvia, a fin de reclamar la sobrefacturación. No pueden tener así a la gente, ellos están hartando a nuestros usuarios y finalmente eso repercute en cuanto al relacionamiento que tenemos a la hora de sentarnos con la gente”, sostuvo Esteban Montania.
Las declaraciones del sindicalista surgieron en comunicación con la radio Universo 970 y el canal GEN. Agregó también que el presidente el ente Luis Villordo debió anular las sobrefacturaciones, teniendo en cuenta que el trabajo de los funcionarios que hacen la lectura iniciaron nuevamente en los primeros días del presente mes.
“Esto se hubiera cortado de raíz anulando estas facturas, el presidente tiene la potestad para anular esto y hacer ahora la facturación, ya que tendrá ahora la lectura, porque los lectores empezaron a salir en los primeros días de este mes, entonces se tendrán las reales. Tampoco tomó la decisión de colocar a la gente comodidades para que puedan solucionar sus problemas, pero esto es lamentable”, sostuvo.
Por otra parte, instó a la ciudadanía a estar atenta ante las versiones de privatizar la empresa bajo el argumento de que no se puede poner “nuestras riquezas” en manos de empresarios.
Guardia desde las 3:00 am
La ciudadana Carolina Méndez, pobladora de la ciudad de Ypane, fue a la institución con la finalidad de reclamar la sobrefacturación. Indicó que cada mes recibía una factura de G. 10.000, pero que en plena crisis sanitaria por el COVID-19 recibió una factura de G. 574.000.
“Desde las 3:00 estoy acá esperando y ellos me dicen que tengo que pagar eso y que me harán en dos pagos y yo le dije que mi medidor me pusieron recién”, relató.
Fuente; La Nación