El neumólogo Carlos Morínigo manifestó que el sistema de salud ya no cuenta con las vacunas contra la influenza a raíz de que las 1.200.000 dosis quedaron cortas por la vacunación masiva de personas que no se encontraban dentro de los grupos vulnerables.
Hoy en día, un millón doscientas mil dosis que se adquirieron por parte del Ministerio de Salud quedaron cortas. También tenemos que tener en cuenta la situación epidemiológica. Estas medidas que se están tomando para evitar la transmisión del COVID-19 también evita la trasmisión de la influenza, son las mismas medidas de protección para evitar que la gente se enferme de la influenza y del COVID-19, ese es un punto a favor que ahora se tiene”, sostuvo el médico.
Las declaraciones de Morínigo surgieron mediante una comunicación con la radio Universo 970 AM. “Quizás se saltaron algunas cuestiones y acá se vacunó gente que no tendría que hacerlo. El Ministerio de Salud tiene que resolver este conflicto, debe comprar rápidamente, nuevamente con la ayuda de quien sea o con los fondos que tenemos destinados para salud completar las vacunaciones correspondiente a los grupos vulnerables, y en eso no tenemos que tardar”, sentenció.
“Nos quedamos cortos”
Morínigo añadió también que las personas que no pudieron acceder a la vacuna tendrán que esperar la segunda fase o adquirirlas por cuenta propia en los centros privados.
Nos quedamos cortos con la vacunación del sector vulnerable. La gente salió a vacunarse masivamente, lo que es un punto positivo; la ciudadanía adquirió esa consciencia en vista a la pandemia, yo diría que las personas pensaron que la inmunidad contra la influenza también les estaría dando la inmunidad contra el COVID-19, cosa que no es así, pero facilitó para que la gente se pueda vacunar, pero hoy en día ya no tenemos las vacunas contra la influenza. La gente que no se puso la vacuna de la influenza tendrá que esperar una segunda compra o comprar ellos de forma particular”, dijo.
No estaban previstas más dosis
“No estaba previsto el tema de la pandemia, esta solicitud correspondiente ya se hizo el año anterior a la temporada. Hace un año estamos recibiendo esa cantidad de dosis y anteriormente sobraban las vacunas y pedíamos a la gente que se vacune. Esto se fabrica exclusivamente para cada país. Ahora tenemos que tener en cuenta que el período de influenza comenzó en abril y esto se puede extender hasta noviembre o diciembre. Es decir, tenemos tiempo de recibir las vacunas de manera de disminuir la mortalidad por este tipo de virus en la población, sumando las medidas correspondiente para la mitigación del COVID-19”, afirmó.
Fuente; La Nación