La Corte Suprema de Justicia en la sesión del 11 de Marzo pasado había resuelto excluir del padrón de abogados a los funcionarios públicos para la elección de representantes del gremio ante el Consejo de la Magistratura, la desicion histórica no fue aprobada por los políticos y mañana intentarán forzar que quede sin efecto.
El Consejo de la Magistratura tiene a dos representantes del gremio de abogados, quienes los eligen en elecciones, tras el pedido de la mayoría de los Colegios de Abogados del país se logró luego de varios años la exclusión de los profesionales del derecho que son funcionarios públicos y como tales están vedados al ejercicio de la abogacía en forma particular y por ende no son representados por los electos.
A lo largo de los años, estructuras políticas partidarias se han apoderado del manejo de la justicia a través del Consejo de la Magistratura, tal es el caso del actual senador Enrique Bacchetta, quien fue representante por dos períodos y ahora su hermano Claudio Bacchetta está pugnando nuevamente por un período más en el cargo.
Por otro lado, esta el equipo liderado desde la sombra por el actual Vice Presidente de la República, representado por Adrián Salas, quien ocupa el cargo por dos períodos y ahora postula a Oscar Paciello para continuar el manejo de la justicia del clan.
Ambas estructuras electorales están basamentadas en el funcionariado público, por lo que la decisión tomada por la Corte no fue del agrado de las cúpulas políticas partidarias y hoy intentan torcen la mano a los ministros para revisar la resolución, logrando nuevamente la inclusión de sus «votos duros» y seguir manejando de esa manera la justicia, traficando influencias.
Cómo moneda de cambio a la fidelidad de los juzgados y fiscalias a la hora de direccional los votos, están las confirmaciones de los «jefes» de cada funcionario.
Con el objeto de evitar este manoseo instalado por décadas en nuestra justicia, los gremios de abogados de todo el país se han puesto de pie y consiguieron un paso importante que quizá mañana sea pisoteada una vez más por los mismos de siempre.
La Corte Suprema de Justicia deberá en sesión extraordinaria el día de mañana viernes resolver si reconsidera o no lo resuelto en la sesión anterior, dando lugar al clamor de miles de abogados o si seguirá siendo funcional a intereses de cúpulas mafiosas que se apoderaron hace años de la justicia del país.