La pandemia del coronavirus “es controlable”, afirmó ayer el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una reunión con países miembros.
“Se trata de una pandemia controlable”, dijo. Pero “hace falta una mayor vigilancia para identificar, aislar, diagnosticar y tratar cada caso y romper la cadena de transmisión”, dijo, reconociendo su preocupación porque “algunos países no están enfrentándose a la amenaza con el compromiso político necesario”, declaró delante de diplomáticos.
Subrayó que los países debían adoptar un “enfoque global adaptado a su situación, con la contención como pilar central”, e instó a los países a “encontrar un justo equilibrio entre la protección de la salud, la prevención de las perturbaciones económicas y sociales y el respeto de los derechos humanos”.
En el mundo se registraron más de 125.000 casos de infección en más de 100 países, causando la muerte de más de 4.600 personas, según diversas fuentes oficiales.
Por primera vez desde el inicio de la epidemia, en diciembre en China, la OMS calificó el miércoles último el nuevo coronavirus de “pandemia”, alarmada por su “propagación”, por la “gravedad de los casos” y por la “insuficiencia de las medidas adoptadas”. “Para salvar vidas, tenemos que reducir la transmisión. Esto significa encontrar y aislar el mayor número posible de casos y poner en cuarentena a sus contactos más cercanos”, explicó Tedros Adhanom Ghebreyesus.
En tanto, la industria farmacéutica de EEUU se metió en una carrera contrarreloj para hallar una vacuna y un tratamiento contra el Covid-19, proceso que duraría más de un año. Algunas farmacéuticas ya anunciaron que en abril iniciarán los primeros ensayos clínicos en humanos para una vacuna. EFE Y AFP