Un video muestra cómo actúan los equipos SWAT del país asiático en los casos en los que las personas no cooperan con las autoridades.

El régimen chino extrema las medidas para evitar nuevos casos de coronavirus. Por ese motivo, las fuerzas de seguridad diseñaron un método para detener a aquellas personas que no quieran cooperar con las medidas sanitarias impuestas por las autoridades.

Un video difundido en las redes sociales muestra un ensayo realizado por los equipos chinos de SWAT en un puesto de control en una carretera de la provincia de Henan.

En las imágenes se puede observar que un agente de tránsito detiene a un automovilista. Luego una persona, con barbijo y un traje especial, se acerca al conductor y con un dispositivo le toma la temperatura.

Al ver que tiene fiebre, le advierte a dos agentes, ambos con máscaras y totalmente cubiertos. Éstos se acercan en conjunto, uno detrás del otro, y le piden al automovilista que se baje.

En vez de hacer caso a las autoridades, el conductor acelera unos metros y en ese momento un camión del SWAT chino enciende las sirenas y le obstruye el paso. Acto seguido, los agentes rodean el auto y vuelven a obligar al hombre a bajarse.

Finalmente, éste desciende del vehículo e inmediatamente un funcionario chino lo atrapa colocándole una red en la cabeza, para luego ser detenido por otros tres agentes, quienes se lo llevan con la cara totalmente cubierta con una especie de gorra negra.

El ensayo termina con varios efectivos chinos desplegados en el lugar, y dos de ellos desinfectando el lugar y a los agentes que tuvieron contacto con el hombre.

Si bien esto se trató de un ensayo, refleja los violentos métodos del régimen para detener a posibles portadores del coronavirus.

Esa misma violencia ha sido aplicada en las últimas semanas contra las personas que intentaron burlar la estricta cuarentena a la que fueron sometidos para evitar un empeoramiento de la epidemia. Así como con aquellas que no usaban barbijos.

Todas esas personas que se animaron a desafiar la censura de las autoridades fueron arbitraria y violentamente detenidas.

Autoridades sanitarias de China reportaron este lunes otros 150 pacientes muertos por el nuevo coronavirus, y de esa forma elevaron a 2.592 el total de víctimas fatales por la epidemia en territorio chino.

En su último balance la Comisión Nacional de Salud señaló que 149 de esos 150 decesos ocurrieron en la provincia de Hubei. También confirmó 409 nuevos casos de contagio, también casi todos en la misma provincia.

En tanto, varias provincias reportaron que no se han registrado nuevos casos de contagio durante varios días seguidos, incluso cuando la situación continúa empeorando dentro de Hubei y fuera de China.

Fuente; Infobae