La jueza Teresita Cazal remitió la comunicación a la Cámara Alta, al día siguiente de que los senadores en mayoría dieron la espalda al cartista. Este es el segundo pedido contra el esteño.

Los senadores ya tienen en sus manos la comunicación de desafuero de uno de sus miembros, el cartista Javier Zacarías Irún. La notificación llegó a la Cámara Alta al día siguiente de que una mayoría le haya quitado al cartista el respaldo político y se le instó a renunciar a su banca.

Con este escenario es prácticamente un hecho que habrá votos de sobra para dar vía libre al desafuero, ya que se precisan 23, y hubo 29 que aprobaron la renuncia.

Además, se da a un poco más de un mes que Zacarías haya perdido los fueros por otro caso que tiene que ver con declaración falsa.

Esta vez la jueza Penal de Garantías de la Circunscripción Judicial de Alto Paraná, Teresita Cazal, dio lugar a la imputación por supuesta comisión de hecho punible de lesión de confianza.

Se le acusa a Zacarías por incitar entre 2014 y 2018 a funcionarios de la Comuna de Ciudad del Este a pagar, con dinero del Municipio, publicidad de la Gobernación, campañas políticas, como así también la producción de programas de entretenimiento y de tinte político.

La presentación había sido promovida por los agentes fiscales Josefina Aghemo y René Fernández, y también incluye a la esposa de Zacarías, la ex intendenta Sandra McLeod.

Hace una semana, era Enrique Bacchetta quien estaba en el ojo de la tormenta, pero fracasó una declaración que instaba al mismo a renunciar como representante ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM).

Uno de los votos que le sirvieron al senador de Colorado Añetete para zafarse de la sanción de sus pares fue el de Zacarías Irún.

El jueves pasado le tocó el turno a este último, ante las nuevas denuncias en su contra sobre enriquecimiento ilícito, y Bacchetta fue uno de los que votaron por su renuncia al igual que otros 28 senadores.

Llamativamente el cartista no apareció en la sesión y se dio a conocer un permiso por motivos particulares, aunque aparentemente manejaba ya la información de lo que sucedería. Uno de sus más recalcitrantes oponentes actualmente en el Senado, Paraguayo Cubas, decidió darle otro tipo de cintarazo, proponiendo su renuncia.

votos cantados. El único que cuestionó la declaración de renuncia fue el cartista Juan Darío Monges, quien junto con su colega Sergio Godoy y el llanista Juan Bartolomé Ramírez rechazaron la propuesta.

La defensa de Monges no se centró en la posibilidad de inocencia de su correligionario, sino más bien por el hecho de que también había otros imputados, entre ellos el propio Payo, y el titular de Diputados, Miguel Cuevas.

Varios senadores dejaron en claro que están dispuestos a acompañar cualquier pedido de investigación en caso de denuncias contra uno de ellos. El luguista Hugo Richer incluso abrió la posibilidad de que se pueda tratar la pérdida de investidura de Zacarías.

El cartista Enrique Riera cuestionó el corporativismo, y prometió apoyar el pedido de desafuero.