Luis Rojas, exministro de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), aseguró que el decreto de Horacio Cartes para hacer “inamovibles” a funcionarios de la Senad puede ser removido por otro similar del presidente electo, Mario Abdo Benítez.
En contacto con ABC Cardinal, Luis Rojas, exministro de la Senad, habló sobre la institución que estuvo a su cargo, sobre la necesidad que existe de reestructurarla y el trabajo que le espera a Arnaldo Giuzzio, quien será el titular de la secretaría estatal durante el gobierno de Mario Abdo Benítez. Esto es en relación al decreto firmado ayer por el presidente Horacio Cartes para declarar inamovibles a algunos funcionarios de la cartera estatal.
«En honor a la verdad, todo lo que sea determinado por un decreto puede ser cambiado por otro decreto; tampoco es para rasgarse las vestiduras. Hay una lucha de la gente de la Senad por dignificar; el origen de todo es una causa justa, pero no de esta manera. Queda muy mal que finalizando este gobierno salga un decreto que busca un populismo interno», opinó al respecto.
Además, insistió en que Giuzzio deberá reorganizar la Senad. «Creo que es una magnífica oportunidad para que pueda realmente adaptar a las nuevas necesidades esta institución tan querida. Tendrá que sanear esta institución”, indicó.
También recordó la denuncia que hizo en su momento con respecto al silencio existente en la institución sobre algunas cuestiones. “Cuando hablamos de narcopolítica en aquel momento, cuando se destapa un poco la olla, nos damos cuenta de que existían elementos importantes que estaban ahí en los archivos, información obtenida judicialmente y que nadie había hecho nada, con elementos contundentes, que no eran una suposición fantasiosa. Entonces, mientras sea el negocio del narcotráfico van a querer entrar en las filas de la Senad», puntualizó.
Aseguró además que los grupos criminales están buscando tener el control. «Para mantener el negocio van a tratar de comprar voluntades y las instituciones deben ser fuertes», recalcó.
En ese contexto, sostuvo que tras sus declaraciones directas en aquella época fue perseguido y la Fiscalía lo procesó, pero luego fue sobreseído. «Me llegó una imputación, fui golpeado en un tema que siempre cuidé, que era mi honorabilidad, pero por suerte la justicia actuó», declaró.