Pobladores de la colonia Canindeyú de esta ciudad hallaron en la víspera gran cantidad de restos óseos y extremidades de ganado vacuno, que despedía fuertes olores en la zona. La Fiscalía del medio ambiente intervino en el hecho.
Desde hace meses atrás, vecinos del barrio San Miguel de la colonia Canindeyú venían soportando intensos olores a animales muertos que inundaba las casas de quienes habitan en la zona. En ocasiones avistaban el sobrevuelo de aves carroñeras y se presumía que algún animal muerto habría cerca.
Ayer, recorriendo un área rural, de difícil acceso, un vecino se encontró con la dantesca escena: gran cantidad de cabezas y extremidades de vacunos esparcidos en dos sitios distantes unos 50 metros entre sí a la vera del camino y a escasos 400 metros de la avenida Bernardino Caballero que conduce al aeropuerto de Salto del Guairá.
En uno de los lugares se encontró gran cantidad de huesos de cabezas mientras que en el otro sitio fueron halladas patas de ganado vacuno, algunos quemados y otros con muestras de haber sido recién faenados y despidiendo un fuerte olor.
Tras la denuncia hecha por redes sociales, tomó intervención esta mañana el Ministerio Público y la Municipalidad. Llegaron al lugar el fiscal de delitos ambientales, Israel Villalba con inspectores municipales con apoyo de la Policía Nacional.
La comitiva constató que el sitio ha sido rápidamente «limpiado» pero de igual forma quedaron vestigios de lo denunciado por los vecinos.
Los interventores pudieron constatar que en el sitio empleaban cubiertas viejas para quemar los restos de animales. Los huesos que quedaban eran supuestamente comercializados en la zona de Pindoty Porã, sin precisar para que uso.
El fiscal Villalba dijo que abrirá una carpeta de investigación, a fin de identificar a los responsables del hecho y castigar a los autores del presunto delito contra el medio ambiente.
Fuente ABC color.