Antoliano Colmán, uno de los hinchas de San Joaquín, tuvo que ser trasladado al Hospital de Coronel Oviedo y sufrió ruptura de brazo y dos costillas. Todos los gastos debe ser solventados por él.
Los heridos tras el desplome de la gradería móvil instalada en la cancha de Simón Bolivar el pasado domingo, siguen esperando la ayuda de los dirigentes de la liga de fútbol local, atendiendo que ninguno de ellos se hicieron responsables del hecho, según denunciaron.

 

De acuerdo a los datos, las graderías móviles fueron instaladas exclusivamente para el encuentro entre el crédito local contra el seleccionado de San Joaquín, por el Campeonato Nacional de Interligas.

 

Don Antoliano Colmán(78), uno de los hinchas de San Joaquín, tuvo que ser trasladado al Hospital de Coronel Oviedo y sufrió ruptura de brazo y dos costillas. El hombre es el sostén de su familia y en las condiciones en la que se encuentra no puede realizar ninguna actividad labora.

 

Pero la más perjudicada fue la docente Wilma  Jadiggi González, con cuatro meses de embarazo, que este miércoles estuvo realizándose estudios especializados en IPS Central para ver en que condiciones se encuentra su bebé y ella.

 

En comunicación telefónica con Prensa 5, la docente y madre de familia, nos comentó que los profesionales médicos le diagnosticaron problemas en algunos nervios, como consecuencia de los golpes sufridos.

 

Refirió que tendrá que utilizar una faja por unos meses, pero esto no garantiza que su problema desaparezca, indicando que hasta el momento no puede moverse y tiene dolores muy fuertes.

 

La mujer, relató que se encontraba con su hijo de 13 años sentados en la gradería y todo ocurrió en un minuto.

 

El adolescente sufrió varios golpes y la que se llevó la peor parte fue la docente, quien mencionó que ninguna autoridad deportiva se acercó para ver las condiciones en la que se encuentran. Refirió que de acuerdo a los estudios su bebé estaría en buenas condiciones. Con este sería su tercer hijo.