El motobolt imputado por homicidio doloso tras apuñalar a un supuesto asaltante relató la difícil situación que está atravesando en medio de su prisión domiciliaria y sin poder trabajar. Comentó que está sobreviviendo de rifas y sorteos y tiene dos hijos por mantener. Pidió a la Justicia que su caso se resuelva lo antes posible.
Diego Delgado (28), el conductor de Moto Bolt que terminó imputado por homicidio doloso luego de apuñalar a un presunto ladrón, conversó con radio Monumental 1080 AM sobre lo difícil que se está volviendo todo tras la disposición de su prisión domiciliaria, que le impide poder trabajar.
El joven, padre de dos niños pequeños, mencionó que está recurriendo por el momento a rifas y sorteos para poder juntar un poco de dinero. “Tenía mi trabajo en el banco y hacía de motobolt. Tener dos niños no es nada barato y siguen también los gastos del proceso judicial”, describió.
El trabajador imputado dijo que no tiene el dinero suficiente para poder pagar una fianza y que la vivienda de sus padres quedó como garantía.
“Yo no tengo para pagar ninguna fianza. No me dieron la posibilidad de poder trabajar y es más difícil así. Comencé a hacer sorteos para recaudar dinero. Muchos se solidarizaron conmigo”, prosiguió.
En ese sentido, mencionó que en todo este proceso ya tuvo un gasto aproximado de G. 20 a G. 25 millones.
“Esto me agarró totalmente desprevenido. Hubiera dejado nomás que se vaya y yo hubiera seguido mi camino. La gente de bien, la gente honrada, igual nomás termina perdiendo y genera mucha impotencia. Ese es el mensaje. Vos tenés que dar no más tus pertenencias”, expresó con impotencia.
Delgado ya declaró y ahora espera que la Justicia resuelva lo antes posible su caso. “No sé qué pruebas más necesitan para determinar ya mi caso. Ya declaré y entregué muchísimas pruebas”, subrayó.
Teme exponerse a elevada condena
En otro momento, comentó que la defensora pública que le otorgaron en su momento le dijo que, como mínimo, le otorgarían 30 años de cárcel por lo ocurrido.
“Ahí decidí irme con un abogado privado. La defensora pública no nos dio esperanzas”, dijo el trabajador de plataformas.
Todo ocurrió en octubre pasado, en el barrio Isla Bogado, de Luque, Central; cuando Diego fue interceptado por Bruno Alfredo Acosta Alvarenga (21), el supuesto asaltante que resultó víctima fatal en el caso.
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